El sofisticado e indiscreto juguete de Google tendrá que esperar. Es lo que piensa el gurú de las nuevas tecnologías Rober Scoble, uno de los afortunados que ha tenido la oportunidad de probar las novedosas gafas.
Google debería ajustar el precio del dispositivo por debajo de los 300 $ (220€) y realizar bastante mejoras en su API, el diseño y la duración de la batería, escribió Scoble en Google+.
"El precio importará mucho" pero lo que se oye es que las gafas costarán más de 500$ (360€), lo cual las condenará al fracaso.
"Cuando su precio baje de los 300$ y reciban varias mejoras, el mercado crecerá, será en 2016"
Estas son las razones por las que Scoble piensa que Google Glass no será un éxito inminente:
1. Las expectativas de los usuarios son demasiado altas.
2. Por el momento las gafas son difíciles de adquirir.
3. No hay suficientes aplicaciones. Por ejemplo, aún faltan Uber y Foursquare y siguen careciendo de soporte para Facebook.
4. La interfaz de usuario no puede manejar una gran cantidad de aplicaciones.
5. La batería tiene poca duración, unos 45 minutos en la grabación de vídeo.
6. Resulta difícil enviar imágenes de las gafas al móvil en tiempo real.
7. No existe un filtrado contextual. Por ejemplo, "si estoy dando una conferencia ¿por qué las gafas no reconocen la situación y dejan de mostrarme tweets? Al menos éstos podrían tener relación con la conferencia", escribe.
8. No es fácil para los desarrolladores permitir a los usuarios probar sus aplicaciones.
A pesar de todo Scoble reconoce que ama sus Google Glass. "Dicho esto las seguiré usando", escribe. "Nos vemos en el próximo evento Consumer Electronics Show de Las Vegas", "llevaré mis gafas incluso si Chris Voss me lleva a un show de striptease, o quizá mejor no".
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