El próximo iPhone podría y debería traer agradables sorpresas. Hoy hemos sabido que Apple se ha unido al Wireless Power Consortium –Consorcio de Energía electrónica- lo cual sugiere que posiblemente el próximo modelo de la manzana incluya un práctico sistema de carga inalámbrica.

Quizá no sea una gran novedad para un dispositivo que vio la luz hace ya 10 años y compite en un mercado saturado e hipercompetivo, con productos prácticamente iguales que a duras penas consiguen aportar novedades tecnológicas.

Apple podría estar colaborando con el WPC en lugar de estar desarrollando una tecnología propia y específica de carga inalámbrica, como se había pensado hasta ahora. Este consorcio es el responsable del estándar de carga inalámbrica Qi, elcual posiblemente será también usado por el iPhone 8. Hasta ahora, compañías como Nokia, Asus, Lenovo y Samsung forman parte del consorcio y utilizan también este estándar.

Por otra parte y según el analista Ming-Chi Kuo, el próximo iPhone 8 tendrá una pantalla más pequeña (4,7 pulgadas) y pero con una gran batería similar a la del iPhone Plus.

La compañía dirigida por Tim Cook ha comentado respecto a esta colaboración:

“Apple es miembro de muchas organizaciones de desarrollo de estándares, tanto como líder como contribuidor. Apple se une al Wireless Power Consortium para participar en el desarrollo abierto y colaborativo de los estándares de carga inalámbrica. Estamos muy emocionados de trabajar con el WPC y sus otros miembros”.

Hace solo un mes que Apple registró un “dispositivo electrónico inalámbrico” ante la cámara de comercio estadounidense, con tecnología relacionada a la carga inalámbrica y se sabe que ha contratado expertos en estos sistemas en los últimos meses.

Todas las pistas parecen conducir por tanto a que los próximos modelos de iPhone -tres previstos para este año- contarán por tanto con un sistema de carga inalámbrica, algo que en poco tiempo será una función imprescindible en todos los dispositivos móviles.