Son muchos los que piensan que una buena campaña de Relaciones Públicas puede arreglarlo casi todo, aunque cuando hablamos de casos como el de Volkswagen, no nos gustaría estar en el pellejo de los profesionales encargados de limpiar la imagen de la compañía, recuperar su reputación e influir en la opinión pública.
Consciente de la gravedad de la situación y de cómo puede afectar a sus ventas y cotización en bolsa el escándalo de sus malas prácticas, la compañía ha decidido poner en marcha un plan de comunicación capaz de sofocar un fuego que no termina de apagarse.
Para ello la compañía ha comenzado por crear una pieza gráfica, desarrollada por la agencia Deutsch L.A., en la que la marca asegura estar trabajando para "hacer las cosas bien" y en la que también anuncia una serie de beneficios para los propietarios de vehículos afectados. Estos consisten en una tarjeta Visa cargada con 500 dólares para cualquier compra y otra tarjeta regalo, con la misma cantidad, para gastos en Volkswagen.
Más que una pieza creativa al uso, nos encontramos con una declaración de principios, una carta austera y sencilla dominada por el texto, firmada por el CEO de la compañía para América, Michael Horn, con la que la compañía intenta transmitir seriedad y confianza a los consumidores, además de una acción de marketing directo.
Por el momento la pieza ha empezado a difundirse en importantes cabeceras estadounidenses como USA Today, The New York Times, Washington Post, Chicago Tribune o Los Angeles Times. La campaña contará también con presencia en Internet, mediante anuncios de display.